Conexión Berlin

En L.A.M.A., querrás deshacerte de las cartas de tu mano lo más rápido que puedas, pero es posible que no puedas jugar lo que quieras, así que, ¿dejarás de jugar y congelarás tu mano o robarás cartas y esperarás la indicada?

Cada jugador comienza una ronda con seis cartas en la mano; el mazo consta de cartas de llama y cartas numeradas del 1 al 6, con ocho copias de cada una. En un turno, el jugador activo puede jugar una carta, robar una carta o abandonar. Para jugar una carta, debe jugar el mismo número que la carta superior de la pila de descarte o un número superior. Si hay un 6 en la pila de descarte, puedes jugar un 6 o una llama, y ​​si hay una llama arriba, puedes jugar otra llama o un 1. Si abandonas, colocas las cartas restantes boca abajo y no tomas más acciones en la ronda.

La ronda termina cuando un jugador vacía su mano o todos los jugadores abandonan. En cualquier caso, los jugadores recolectan fichas en función de las cartas que tienen frente a ellos, ya sea en la mano o en la mesa. Cada carta con un número diferente en la mano te da fichas blancas (cada una con un valor de 1 punto) igual al valor de la carta, mientras que una o más llamas te dan una ficha negra (con un valor de 10 puntos). Si jugaste todas tus cartas, puedes devolver una ficha (blanca o negra) que hayas recolectado previamente al suministro. Luego barajas todas las cartas y comienzas una nueva ronda.

El juego termina en la ronda en la cual al menos un jugador tenga cuarenta o más puntos en total. ¡Quien tenga menos puntos ganará!