Conexión Berlin

Al igual que con su juego hermano, Kakerlakenpoker, en Kakerlakepoker Royal no hay ninguna similitud con el póker, excepto por el hecho de que se trata de un juego de engaño en el que se emplearán cartas con cucarachas, ratas y chinches en lugar de reinas, ases y dieces. Para comenzar, se mezcla todo el mazo y se reparte todas las cartas entre cada participante. En un turno, alguien toma una carta de su mano y la desliza, boca abajo, hasta dejarla en frente de alguien más. Luego, quien haya elegido la carta declarará qué criatura está retratada en la carta deslizada.

Quien reciba la carta deberá:

• Aceptar la carta diciendo "verdadero" o "falso" y luego revelando la carta boca arriba. Si esta persona se equivoca en su declaración, esta persona deberá dejar esta carta boca arriba en frente de sí. En cambio, si está en lo cierto, la carta deslizada irá a parar, boca arriba, en frente de quien la eligió en primer lugar.

• O bien, rechazar la carta pudiendo, antes, verla en secreto, para luego deslizársela hacia otra persona que no sea quien la eligió originalmente. Al momento de pasar la carta, quien lo esté haciendo podrá declarar que se trata de la misma criatura que se declaró en primer lugar o una totalmente diferente. La carta ya no podrá pasarse si la persona que la está recibiendo es la única de la mesa que aún no ha visto la carta. En ese caso, quien sea que la esté recibiendo deberá tomar la primera decisión de aceptar la carta declarando si es cierto o falso de qué criatura se trata.

La partida termina tan pronto alguien ya no tenga cartas para pasar o cuando alguien tenga, en frente de sí, cuatro cartas de la misma criatura. En cualquiera de los dos casos, esta persona es quien pierde y, el resto, gana.

En esta versión de Kakerlakenpoker se agregan nuevas criaturas "reales" para crear más opciones de mentira durante la partida.